sábado, 26 de septiembre de 2015


MITOS Y LEYENDAS 
LEYENDAS


Una leyenda es una narración popular que cuenta un hecho real , fabuloso de hechos naturales, sobrenaturales o una mezcla de ambos que se transmite de generación en generación en forma oral o escrita. Generalmente, el relato se sitúa de forma imprecisa entre el mito y el suceso verídico, lo que le confiere cierta singularidad.
Se ubica en un tiempo y lugar familiares a los miembros de una comunidad, lo que aporta cierta verosimilitud al relato. En las leyendas que presentan elementos sobrenaturales como milagros, presencia de criaturas feéricas o de ultratumba, etc. y estos sucesos se presentan como reales, forman parte de la visión del mundo propia o emic de la comunidad en la que se origina la leyenda.

En su proceso de transmisión a través de la tradición oral, las leyendas experimentan a menudo supresiones, añadidos o modificaciones culturales que dan origen a todo un mundo lleno de variantes. Las más comunes es la "cristalización" de leyendas paganas o la adaptación a la visión infantil, cuando el cambio de los tiempos ha reducido las antiguas cosmovisiones paganas a cuentos para niños.



EL HOMBRE CAIMÁN



Cuenta la leyenda que en la localidad de plato vivía un hombre pescador, al que le gustaba mirar a las mujeres que lavaban y se bañaban en las aguas del río Magdalena. Tenía tanto interés por observarlas, pero a la vez tanto miedo de ser descubierto que fue en busca de un brujo a la alta guajira (cuya capital conocemos, Riohacha). Este brujo le dio como solución dos pócimas, una roja y otra blanca. Con la poción roja se convertiría en caimán, y podía observar de cerca a las muchachas sin peligro de que lo descubrieran y luego, lógicamente, le fueran a dar un escarmiento. La poción blanca en cambio lo devolvería a su estado natural humano y un amigo debía suministrársela a la vuelta de sus correrías.

Durante un tiempo el hombre disfruto de su condición y de sus correrías, observando a las mujeres mientras se bañaban, inocentes, en el río. Un día su compinche no pudo acompañarlo, pero envió a otra persona que era la encargada de suministrarle la pócima que lo haría hombre. Al ver el caimán de cerca, el hombre se asusto y dejo caer la botella, derramándose su contenido. Se perdió el antídoto, pero unas gotas cayeron sobre la cabeza del hombre caimán, dejándolo mitad hombre, mitad caimán.

A partir de ahí el hombre no pudo espiar a más mujeres mientras se bañaban porque se convirtió en el terror del lugar. Nadie se bañó más en esa parte del río y el hombre caimán sólo era visitado por su madre, quien le preparaba y llevaba sus alimentos favoritos. A la muerte su madre el hombre caimán decidió dejarse arrastrar por el río hasta su desembocadura, donde desapareció. Aún hoy los pescadores tienen la esperanza de cazarlo


LA MADREMONTE
Los campesinos cuentan que cuando la Madremonte se baña en las cabeceras de los ríos, estos se enturbian y se desbordan, causan inundaciones, borrascas fuertes, que ocasionan daños espantosos.
La Madre Monte castiga a los que invaden sus terrenos y pelean por linderos; a los perversos, a los esposos infieles y a los vagabundos. Maldice con plagas los ganados de los propietarios que usurpan terrenos ajenos o cortan los alambrados de los colindantes. A los que andan en malos pasos, les hace ver una montaña inasequible e impenetrable, o una maraña de juncos o de arbustos difíciles de dar paso, borrándoles el camino y sintiendo un mareo del que no se despiertan sino después de unas horas, convenciéndose de no haber sido más que una alucinación, una vez que el camino que han trasegado ha sido el mismo.



EL CURA SIN CABEZA
Cuenta la leyenda que por las noches aparece de la nada el fantasma de un sacerdote (o bien, un fraile o monje) católico, vestido con el hábito usual de su orden o con sotana, pero con la particularidad de que no tiene cabeza, por lo que causa terror y pánico entre la gente. Algunas versiones de la leyenda del sacerdote sin cabeza coinciden en que el personaje se trataba de un cura católico cuyo comportamiento no era el adecuado para una persona de su investidura, quien, como castigo por sus actos, fue decapitado, o bien, se trataba de un sacerdote que fue injustamente decapitado por sus enemigos, tras lo cual su fantasma se aparece deambulando por las noches, ya sea por las calles o en ermitas, iglesias y otros recintos religiosos, buscando desolado su cabeza, espantando a los pecadores, o como mudo testigo que reclama justicia por su muerte. También se dice que en algunas ocasiones se aparece en el interior de recintos religiosos celebrando misa, o bien, en el interior de algunos locales como antiguos colegios o edificios donde se rumor a que ha muerto un sacerdote en extrañas circunstancias. Finalmente, otra de las características de estos fantasmas es aparecerse en sitios donde se guardan tesoros, que los espectros cuidan celosamente hasta que aparezca alguno con la valentía suficiente para reclamarlos.




LA PATASOLA
Habita entre la maraña espesa de la selva virgen, en las cumbres de la llanura. Con la única pata que tiene avanza con rapidez asombrosa. Es el endriago más temido por colonos, mineros, cazadores, caminantes, agricultores y leñadores.
Algunos aventureros dicen que es una mujer bellísima que los llama y los atrae para enamorarlos, pero avanza hacía la oscuridad del bosque a donde los va conduciendo con sus miradas lascivas, hasta transformarse en una mujer horrible con ojos de fuego, boca desproporcionada de donde asoman unos dientes de felino y una cabellera corta y despeinada que cae sobre el rostro para ocultar su fealdad.  




LA LLORONA
Quienes le han visto dicen que es una mujer revuelta y enlodada, ojos rojizos, vestidos sucios y deshilachados. Lleva entre sus brazos un bultico como de niño recién nacido. No hace mal a la gente, pero causan terror sus quejas y alaridos gritando a su hijo.

Las apariciones se verifican en lugares solitarios, desde las ocho de la noche, hasta las cinco de la mañana. Sus sitios preferidos son las quebradas, lagunas y charcos profundos, donde se oye el chapaleo y los ayes lastimeros. Se les aparece a los hombres infieles, a los perversos, a los borrachos, a los jugadores y en fin, a todo ser que ande urdiendo maldades.



MITOS

Un mito (del griego μῦθος, mythos, «relato», «cuento») es un relato tradicional que se refiere a acontecimientos prodigiosos, protagonizados por seres sobrenaturales o extraordinarios, tales como dioses, semidioses, héroes, monstruos o personajes fantásticos, los cuales buscan dar una explicación a un hecho o un fenómeno.

Los mitos forman parte del sistema de creencias de una cultura o de una comunidad, la cual los considera historias verdaderas. Al conjunto de los mitos de una cultura se le denomina mitología. Cuanto mayor número de mitos y mayor complejidad tiene una mitología, mayor es el desarrollo de las creencias de una comunidad. La mitología sustenta la cosmovisión de un pueblo.



Nacimiento de La Luna y El Sol (Mito colombiano)

En medio de la oscuridad una hermosa india arhuaca tuvo dos niños que desprendían luz por todo el cuerpo. Ella, temerosa de que al verlos se los robaran, los escondió en una cueva, Sin embargo; el resplandor que producían era tanto que se filtraba por las hendijas de la puerta y fácilmente fue visto por los demás indios que, curiosos, quisieron saber qué había dentro.

Con flautas, caracoles y tambores llegaron hasta las cercanías de la cueva y empezaron a tocar una música hermosísima. Las suaves notas llegaron a los oídos de los niños indios y Yuí, el varón, salió para escucharla mejor.

Al verlo los indios trataron de cogerlo, pero Yuí voló y subió hasta el cielo en donde se convirtió en sol; los indígenas que miraron para verlo, quedaron convertidos en piedra.

Empero, la luminosidad que había en la cueva continuaba y tenues rayos se asomaban por las hendiduras; los indígenas decidieron tocar más hermoso y Tima, la hermana de Yuí. también salió para escucharla mejor; los indios, temerosos de que se les escapara, le arrojaron cenizas a los ojos para así cegarla, pero ella voló en la misma dirección de su hermano y se situó muy cerca.

Como la cara le había sido encenizada, no tuvo el mismo resplandor de Yuí, pero en las noches vigila los prados de los Icjas. Tima se convirtió en luna.



 El mito muisca de Bachué

Bachué, la madre del género humano, que emrgió de la laguna de Iguaque, cerca a Tunja con un niño de tres años. Cuando el niño Iguaque creció, Bachué se casó con él, realizándose así, el primer matrimonio muisca. Esta unión fue tan prolífica y fecunda, que en cada parto la mujer tenía entre cuatro y seis hijos, con lo cual muy pronto se llenó de gente la tierra. Este es el mito muisca del origen del género humano.

Bachué e Iguaque viajaban por todas partes, dejado hijos en todas ellas. Cuando ya estaban viejos llamaron a sus descendientes y fueron acompañados hasta la laguna de Iguaque su lugar de origen. Allí Bachué les hizo una conversación final exhortándoles a ala paz, después de la cual se despidieron y se convirtieron en dos grandes serpientes que se sumergieron en la laguna, que desde entonces se convirtió en santuario. 



Mito La Diosa Bachue (Laboratorio Bachue) Colombia

TALLER
MITOS Y LEYENDAS

1. Describa con sus propias palabras qué es una leyenda y un mito y mencione tres características de cada uno.

2. Realice un cuadro comparativo entre mitos y leyendas (función del relato o los personajes, elementos populares...).

3. Consulte y resuma una leyenda (de origen colombiano preferiblemente) de su preferencia

4. Realice la lectura de 3 mitos griegos y seleccione uno para compartirlo en clase. 

5. Escribe un mito de tu autoría que explique el fenómeno que desees. 



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